Aún recuerdan mis labios
la dulzura de un pasado;
recuerdos que el tiempo no ha borrado
pero los ha hecho mutar.
Se han tornado en amargura;
en un imborrable residuo en mi paladar.
Son tus recuerdos en mi lecho,
en mi alcoba, en la cocina;
que revivo aunque no quiero.
No se si me lastima
lo que hiciste,
la manera en que te fuiste
o que te espero todavía.
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Gracias Pippo…
Que bueno que le haya gustado, saludos siempre.