Boga mar adentro, cava más profundo;
huye de la superficie.
En la orilla hay muchedumbre,
gentío que se muerden uno al otro.
Mueren de lo mismo, pues se alimentan de lo mismo;
del desperdicio de cada otro.
To’ eso que escupen los medios de comunicación
se lo tragan por filosofía de vida.
Ya no late su corazón,
pues su oficio es vivir otras vidas;
son todos menos ellos mismos:
son el actor, el cantante, son el otro;
pero ellos mismos no saben quienes son,
no conocen su herencia.
Han desechado los libros,
han ignorado/despreciado la historia
para luego andar a tropezones en su propia ignorancia.
Les han hecho «la camita»
y les dirigen como títeres a su triste tumba.