Entre el espacio de cada minuto
escucho ahogarse el suspiro de la brisa
que se cuela por la ventana.
Los pasos de algunos peatones
y el esparcir de los charcos
entre el viento que producen los autos.
Pero tu voz… ¿Dónde?
Me fastidia tu silencio.
Entre el espacio de cada minuto
escucho ahogarse el suspiro de la brisa
que se cuela por la ventana.
Los pasos de algunos peatones
y el esparcir de los charcos
entre el viento que producen los autos.
Pero tu voz… ¿Dónde?
Me fastidia tu silencio.